Uno
que ya cuenta con los setenta y cinco años pasados, ve con cierta pena o
melancolía aquellas Navidades de la niñez y la Juventud, muy distintas a las de
hoy, tanto en la forma como en el fondo.
La
Navidad para nosotros eran las fechas más bonitas del año, recuerdo con
nostalgia, los famosos Nacimientos o Belenes que casi en todas las casas se
ponían, era muy bonito la participación de todos los miembros de la Familia,
preparando y colocando el Nacimiento, cada año, se iba mejorando, tanto en el
tamaño que ocupaba dicho Nacimiento así como las figuras y casas que lo
componían, recuerdo los últimos años que ocupaba una habitación entera, las
casas fabricadas por nosotros mismos con escayola, existía un rio de agua
corriente y muchos detalles más.
Existía
en aquella época, un concurso de Belenes organizado por la antigua Falange y
posteriormente por la Organización Juvenil Española.
Miembros
del jurado pasaban por los domicilios para ver y calificar los Belenes
inscritos en el concurso.
Los
premios se entregaban en el teatro Lopez de Ayala, nosotros conseguimos un año
el primer premio y otro dos el segundo.
Toda
esta preparación era muy emotiva y tenía un profundo carácter religioso, se
estaba preparando la verdadera Navidad Cristiana, era un día para disfrutar de
la unión familiar, ese día no había Regalos, aun Papa Noel, no había aparecido,
ni existía el árbol Navideño.
En
la tarde de la noche buena, grupos de Niños o jóvenes del barrio salían
cantando villancicos por las calles, aco y pidiendo el aguinaldo, esto
comenzaba a darle el carácter festivo de esa gran noche.
En
cada casa y esa noche de Noche Buena, se cantaban villancicos delante del
Belén, acompañando con zambombas, guitarras, panderestas y no podía faltar la
famosa botella de anís convertida en un importante instrumento.
La
cena era un momento de unión familiar que jamás se olvidara, mis padres, nos
explicaban el verdadero significado de ese día y del nacimiento de Jesus, se
rezaba una oración antes de comenzar la cena.
El
menú podía ser una sopa de almendras, el tradicional pavo y gran variedad de
turones, peladillas, polvorones. No existían móviles, por lo que se podía
conversar en la mesa y hablar del significado de la verdadera Navidad.
A
las doce era la tradicional Misa del Gallo, íbamos barias familias juntas, en
mi caso de la colonia de chalet donde vivíamos, era algo muy especial sobre
todo para los mas jovencitos, el salir a esa hora, ya que el resto del año y
dependiendo de la edad había que estar en casa unos a las nueve y otros a las
diez de la noche como muy tarde.
Indudablemente
todo ha cambiado, se ha apartado el tema religioso, que se ha cambiado por algo
comercial y el periodo Navideño se va ampliando cada año más, por fines
puramente comerciales, como prueba, la iluminación Navideña se inaugura ya a
finales de Noviembre.
Guirnalda
luces de colores con dibujos que en nada tienen que ver con motivos Navideños,
todo fruto de un márquetin comercial, movido por los grandes almacenes.
Los
Belenes domestico casi desaparecidos, sustituidos por los árboles de Navidad,
Abetos o Pinos adornados con, bolas, guirnaldas y diversos adornos.
La
festividad de Los Reyes Magos, casi a pasado al día de Papa Noel (día de
Navidad), es casi general que a los Niños se les diga que los juguetes se los
trae Papa Noel, por lo que recogerán sus regalos el día de Navidad. En cuanto a
la filosofía de los regalos también se ha cambiado, antes en las cartas a los
Reyes te inculcaban que pidieras poco ya
que había muchos niños que se quedarían sin nada, hoy todo lo contrario, los
niños han de pedir lo más caro o lo último que las grandes Cadenas Comerciales
hayan puesto de moda, las manas joyas de gran valor y así solo se piensa en lo
material, en tener más que el de al lado.
Cambia
tambien sustancialmente la carta en la Cena Navideña, hoy son Mariscos de
distintas clases, jamón, regados de buenos vinos, el turrón ha disminuido.
Las
cenas a veces se juntan varias familias, lo que ha roto esa intimidad familiar,
claro está que todo ha cambiado.
Creo
que lo primero que ha cambiado es la Familia, que salvo excepciones ya no
existe.
La
religión ha pasado a un segundo, o yo diría a ultimo termino y todo aquello que
de alguna manera recuerde a la Religión Católica lo han hecho desaparecer.
Todo
ello ha hecho cambiar nuestros principios, virtudes y valores y está creando
una sociedad sin respeto alguno a los demás, da pena decirlo pero así es y
comienza desde pequeños hoy la figura del Maestro esta cada dia mas
desautorizada, pero este tema lo tratare más a fondo y con pruebas en una
publicación destinada a ello.
Solo
resta decir que me encantaría que todos los niños de hoy vivieran la verdadera
Navidad y convivieran en la verdadera Familia, algunos, pocos, pero aun lo
hacen.